lunes, 23 de septiembre de 2024

"Edipo Rey" de Sófocles (Literatura universal. Lectura de aula)


     La producción literaria de Sófocles (496-406 a. C) se enmarca en el periodo de mayor esplendor de la Atenas Clásica. Este periodo es conocido como el siglo de Pericles, en referencia al político ateniense que gobernó la ciudad en tiempos del autor y que fomentó un extraordinario ambiente de creatividad en los estudios de Filosofía, escultura, literatura, etc.  

    Dentro de ese contexto favorable al cultivo de las artes, el teatro de Sófocles fue especialmente celebrado y valorado. Edipo rey se considera una de las mejores tragedias del autor y, por extensión, del teatro griego. Pertenece al ciclo tebano, es decir, un grupo de obras (como Antígona) cuya temática gira en torno a Tebas y el linaje de Edipo. 

    Argumento de la obra

    Una devastadora peste azota Tebas, por lo que Edipo, el actual rey de la ciudad, envía a su cuñado Creonte al oráculo de Delfos en busca de remedio que ponga fin a la mortal epidemia. La respuesta del dios Apolo es clara: la peste cesará cuando el asesino de Layo, el antiguo rey de Tebas, sea condenado a muerte o al exilio. Edipo promete hacer justicia y lanza las más grandes amenazas contra el autor del crimen, sin saber que recaían sobre sí mismo... trataremos de no desvelar el final de la obra.

    Tema principal y secundarios

El tema principal es la fuerza inexorable del destino, de donde proviene el sentido trágico de la obra. Desde su nacimiento, Edipo está marcado por una serie de vaticinios de los que no podrá escapar. Son los siguientes:

-El rey Layo recibió una profecía según el cual su hijo le asesinaría. Por ello, ordenó a un criado que se llevara al recién nacido Edipo al monte y que lo abandonará allí. El criado se apiadó del bebé y se lo entregó a un pastor. Este lo dio en adopción a los reyes Pólibo y Mérope.

-Edipo huyó de su familia adoptiva tras escuchar al oráculo de Apolo, que le vaticinaba que mataría a su padre y dormiría con su madre. En la huida, se cruza por azar con el rey Layo y su comitiva...

-Continuando su camino, Edipo encontró Tebas acosada por la Esfinge, que planteaba un enigma a todos los  transeúntes y destruía a los que no supieran responder. Edipo resolvió el enigma y la Esfinge se suicidó. En recompensa, recibió el trono de Tebas y la mano de la reina viuda Yocasta. Para librar a la ciudad que asola la peste, promete un terrible castigo para el asesino del antiguo rey de Tebas...

Otros tema secundarios: la búsqueda de la verdad y de la justicia, el sacrificio personal del héroe en favor de la comunidad y la ira divina que castiga los delitos humanos (de Edipo) aunque se cometan desde la ignorancia.

Edipo rey es la obra maestra de Sófocles; incluso Aristóteles la consideraba la tragedia ideal. En ella aparecen reflejados avances del autor con respecto al teatro de su tiempo: más personajes en escena, pérdida del protagonismo del coro en favor del diálogo de los actores y dominio de la intriga dramática. Finalmente, es inevitable sentir compasión ante la grandeza trágica del héroe que sucumbe inocente ante un destino que no puede cambiar.


martes, 10 de septiembre de 2024

Frankenstein o el moderno Prometeo  de Mary Shelley (Lectura de Literatura Universal. 1ª EV.)




Dieciocho años tenía Mary Shelley cuando escribió las primeras líneas de Frankenstein. Publicado el 1 de enero de 1818 y enmarcado en la tradición de la novela gótica, el texto habla de temas tales como la moral científica, la creación y destrucción de vida y el atrevimiento de la humanidad en su relación con Dios.  Aunque Frankenstein está impregnado de elementos de la novela gótica y el movimiento romántico, se ha argumentado que debería considerarse la primera historia verdadera de ciencia ficción.

El origen
En mayo de ese año, la pareja formada por el joven poeta romántico Percy Shelley y la joven que poco después se convertiría en su esposa, Mary Wollstonecraft Godwin, se desplazó a Suiza para pasar el verano junto al gran poeta Lord Byron, quien se había instalado junto a su joven médico, John William Polidori, en Villa Diodati, a orillas del lago Leman, cerca de Ginebra. Eran días de lluvia que les mantenían casi todo el día encerrados en casa. Para entretenerse, decidieron escribir un cuento de miedo cada uno. Byron y Shelley comenzaron sendos relatos, pero ninguno de los dos poetas culminó ninguna obra que tuviera su origen en aquel juego literario. Sí lo hizo Mary Shelley, quien hasta la fecha se había limitado a escribir cuentos infantiles sin grandes pretensiones literarias. Y así fue como, en 1818, vio la luz una novela fundamental en la historia de la literatura de terror y un personaje mítico en la cultura popular moderna.


Pero Mary Shelley no quiso escribir un relato que aterrorizara al lector exclusivamente por la fealdad del monstruo ni por sus atroces crímenes. Su terrorífica historia está cargada de simbolismos y de significaciones que invitan a la reflexión del lector sobre muchos aspectos de la condición humana. Así pues, el terror de su relato procede, fundamentalmente, de la osadía de un personaje que se atreve a intervenir en el orden de la naturaleza y a inmiscuirse en los misteriosos secretos de la creación de la vida. Por esta razón, nuestra autora no le dio el protagonismo absoluto al monstruo, sino que le hizo compartirlo, por lo menos, con su creador, el joven estudiante e investigador Víctor Frankenstein, cuyo apellido sirve de título a la obra.
El monstruo, de hecho, permanece sin nombre a lo largo de la novela, y solo las versiones cinematográficas posteriores fueron las que lo bautizaron con el nombre de su creador. En realidad, el título completo de la obra es Frankenstein o el moderno Prometeo, con el que se identifica al personaje (al hombre, no al monstruo) con la figura mitológica de Prometeo, descrita por Ovidio en sus Metamorfosis. Prometeo es un titán, un poderoso dios, que, según unas versiones, crea al hombre, y según otras, le aporta el fuego, en contra de la voluntad de Zeus, por lo que sufrirá el castigo correspondiente a su soberbia. Víctor Frankenstein es, pues, como Prometeo, un personaje que se rebela contra el orden de la naturaleza (un romántico, sin duda) y que, llevado por la soberbia de su ambición científica, se atreve a crear vida a partir de la materia inerte. Las horribles consecuencias de su experimento sobre él mismo, sobre su creación, sobre sus seres queridos y, en general, sobre la humanidad constituyen el núcleo de los acontecimientos que se nos narran en esta apasionante y terrorífica novela, que nos invita, además de a disfrutar de su argumento, a una reflexión sobre los límites de la actuación del ser humano.  

 Recursos:     

EL ÁRBOL DE LA CIENCIA de PÍO BAROJA ( lectura de 2ºBach. 1ªEV.)



        El árbol de la ciencia (1911), obra escrita por Pío Baroja, pertenece a la trilogía de “La raza”. Es la novela noventayochista que mejor expresa la crisis existencial del tránsito del XIX al XX.​ Se considera una obra de carácter autobiográfico (Andrés Hurtado, su protagonista, es el Baroja joven; su tío Iturrioz, el Baroja maduro; la vida del estudiante de Medicina la comparten el protagonista de la novela y Pío Baroja; la lectura de filósofos como Kant, Schopenhauer o Nietzsche, etc.) Está dividida en dos partes (I-III y V-VII), separadas por una larga conversación filosófica entre el protagonista Andrés Hurtado, estudiante de medicina y su tío, el doctor Iturrioz. En la primera parte se narra la vida de estudiante de medicina de Andrés Hurtado. A través de su familia, profesores, condiscípulos y amistades diversas, Baroja traza una despiadada radiografía del Madrid de finales del siglo XIX. En la segunda cuenta la estancia de Hurtado como médico en Alcolea, aprovechada para mostrar la penosa situación del campesinado (caciquismo, ignorancia, desidia, resignación), el retorno a Madrid (donde trabaja como médico de higiene. Baroja hace énfasis en la situación de prostitución de Madrid del siglo XIX).
       El autor,  Pío Baroja, manifestaba en sus memorias sobre este libro: 
«El árbol de la ciencia es, entre las novelas de carácter filosófico, la mejor que yo he escrito. Probablemente es el libro más acabado y completo de todos los míos».

En cuanto al origen del título, en una conversación entre Andrés Hurtado y su tío Iturrioz, este comenta que en el jardín del Edén, cuando Dios crea a Adán y a Eva, había dos árboles muy importantes: el árbol de la vida y el árbol de la ciencia. Dios prohíbe a Adán el fruto del último. Según Andrés, la ciencia es básica y fundamental para el desarrollo humano, pero su tío cree que la verdad es mala para la vida, por lo tanto la vida es peor cuanto más se sabe. Iturrioz le dice que el hombre que come del árbol de la ciencia puede llegar a sentirse como un dios y le esto le puede llevar a la propia destrucción. Su tío le explica que para conocer la vida, la ciencia puede ser más un problema que una ayuda y que es mejor que viva la vida y que no espere nada de la ciencia.
       ¿Con cuál de las dos posturas estáis de acuerdo vosotros? ¿Con la de Andrés o con la de Iturrioz?¿O quizá es más sensato adoptar una postura intermedia?

RECURSOS:
          
Las ideas de Schopenhauer en la base de El árbol de la ciencia: la voluntad de vivir causa, paradójicamente, la angustia vital...


Para el que quiera llegar al fondo de las cuestiones filosóficas tratadas en el libro, aquí tiene este enlace:      



jueves, 5 de septiembre de 2024

 

1ª LECTURA DE 1º BACHILLERATO (1ª EV. Curso 24/25)

Fahrenheit 451, Ray Bradbury

Fahrenheit 451Fahrenheit 451 es la temperatura a la que el papel se inflama y arde. También es la novela distópica por antonomasia (junto a 1984, de G. Orwell, y Un mundo feliz, de A. Huxley), la cual describe una civilización esclavizada por los medios de comunicación, los tranquilizantes y el conformismo. En ella, los libros están prohibidos y el trabajo de los bomberos como Guy Montag es quemarlos, mientras las autoridades rastrean y eliminan a los "bibliodisidentes" que aún conservan y leen libros.

 La visión de Bradbury es brutalmente profética: pantallas de televisión que ocupan paredes con folletines interactivos, avenidas donde los coches corren a 150 kilómetros por hora persiguiendo a peatones, una población que no escucha otra cosa que una insípida corriente de música y noticias transmitidas por unos diminutos auriculares insertados en las orejas. Absolutamente sobrecogedor. Espero que la disfrutéis.

Podéis leer aquí la novela: "Fahrenheit 451"

Una vez hayáis leído la novela, os recomiendo que veáis la estupenda versión cinematográfica dirigida por el cineasta francés François Truffaut. 

Secuencia de la película dirigida por F. Truffaut (1966)

 Aquí os dejo el trailer de una  reciente adaptación al cine (2018) de este libro. Trailer